La CBR1000RR-R 2020 es la Fireblade más potente y radical de la historia.

Superbike que ha salido a la luz totalmente nueva y con un nivel de prestaciones enfocadas al circuito sin precedentes. Y es que durante 28 años las palabras ‘Honda Fireblade’ han sido sinónimo de control total, equilibrio y puro disfrute de conducción. Para 2020, Honda comienza un nuevo capítulo con la Fireblade gracias a una nueva máquina que ha catalogado como “nacida para competir”.

Esto debido a que está inspirada en la RC213V de MotoGP y en la versión para carretera: RC213V-S, sin embargo, con un nuevo motor cuatro en línea, considerado el más potente que nunca haya fabricado Honda y que desarrolla una potencia máxima de 160 kW @ 14,500 rpm, un par máximo de 113 Nm a 12,500 rpm y registra un peso en la báscula de sólo 201 kg.

Adicionalmente, se ha revisado el acelerador electrónico para mejorar el tacto y, con tres modos de conducción por defecto, incorpora opciones para cambiar la potencia, el freno motor, el control de wheelie y el control de par seleccionable honda (HSTC) optimizado. El paquete electrónico también incluye ahora un Start Mode (Modo de arrancada) ajustable. Su pantalla es TFT de 5” personalizable.

En cuanto a su parte ciclo, cuenta con un nuevo bastidor de aluminio tipo diamante, utiliza la parte trasera del motor como anclaje superior del amortiguador; el basculante es más largo y está basado en la RC213V-S. De sus suspensiones, éstas se conforman por una horquilla delantera Showa Big Piston Fork (BPF) de 43 mm y un amortiguador trasero Showa Balance Free Rear Cushion Light (BFRC-L), ancladas a unos discos de freno de mayor diámetro y nuevas pinzas Nissin de cuatro pistones, mientras que el ABS es ajustable. Por su parte, crecieron el neumático trasero, ahora con unas medidas de 200/55-ZR17. Y no sólo eso, sino que ahora la máquina incluye alerones para incrementar la fuerza hacia abajo y mejorar la estabilidad en frenada.

Incluso la CBR1000RR-R estará disponible en versión SP, la cual se distinguirá por estar equipada con una horquilla NPX de 43mm con Öhlins Electronic Control semi-activo de segunda generación, un amortiguador trasero Öhlins TTX36 Smart-EC, nuevas pinzas de freno delantero Brembo Stylema de cuatro pistones y anclaje radial y la misma pinza trasera Brembo que la utilizada en la RC213V-S. Además de un paquete electrónico con una nueva IMU Bosch de seis ejes.

Ambas estarán disponibles en dos colores: una en Rojo Grand Prix de inspiración HRC y otra Negro Mate Perlado.