En ocasiones cambiar de sentido parece una misión complicada, sobre todo si el espacio es reducido y carecemos de la técnica adecuada para dar la vuelta en U.
Para un motociclista novato, dicho movimiento parece mucho más complicada de lo que realmente es; sólo hay que conocer los principios básicos y practicar. Un giro rápido y decidido agilizará tu manejo y te evitará la vergüenza de tirar la moto.
En promedio, en México los carriles miden 3.5 metros de ancho, por lo que contamos con al menos 7 metros para dar la vuelta en U sin problemas, pero con una moto de ciertas dimensiones la tarea puede parecer imposible.

LA VISTA
Para saber a dónde vamos, tenemos que mirar. El primer paso de una vuelta en U es poner los ojos en nuestro destino; para ello debes mirar por encima del hombro y rotar hasta que el manillar se atore.
Con este movimiento, el brazo que se sitúa al interior del giro queda estirado y el contrario, doblado en un ángulo de 90 grados.
De esta forma, la vista por encima del hombro permitirá un vistazo claro del lugar al que nos dirigimos y de la trayectoria de la moto.

BALANCE
La correcta posición de los brazos ayuda muchísimo porque marca el máximo movimiento del cuerpo. De esta forma se garantiza el balance y una posición cómoda.
La clave está en dejar que la moto se incline y haga el giro, y mantener el cuerpo en posición vertical para generar equilibrio. Si desde tu posición puedes ver la rodadura de la llanta delantera, estás en el lugar indicado.
Ten en cuenta que la inclinación de la moto reduce el diámetro del giro, lo que ayuda en espacios más cerrados.
EMBRAGUE
Si bien aplicar los frenos puede ayudar en los giros, un buen control del embrague es el mejor aliado para dar la vuelta en U, al modular la entrega de potencia.
Mantener la moto en el giro, sobre todo es una máquina pesada, requiere la justa entrega de potencia. Lo recomendable es acelerar con suavidad y encontrar la posición exacta de la palanca del embrague en la que la moto comienza a moverse.
El uso de dos dedos y no de cuatro contribuye a un control más exacto de la presión sobre la palanca, y permite mantener contacto con el manillar, pero no es una regla.
Antes de hacerlo en el tráfico, te recomendamos practicar en un estacionamiento vacío. Después de unas cuantas pasadas, tu confianza aumentará y habrás dominado una técnica nueva.

Paso a paso
1. Mirada. Por regla general, las vueltas en U se dan a la izquierda y el primer paso es mirar sobre ese hombro hacia donde queremos llegar.
2. Atora el manillar. Lo que se busca es un giro cerrado, por lo que hay que llevar al manillar hasta que se atore en el extremo izquierdo.
3. Movimiento. El brazo izquierdo queda estirado y el derecho, doblado en 90 grados. Esa posición marcará el máximo del movimiento de tu cuerpo sobre la moto y el punto de balance para que la moto se incline.
4. Embrague. Acelera con suavidad y libera el embrague hasta el punto en que la moto comience a moverse, y mantenlo así hasta completar la vuelta.
5. Acelera. Una vez terminado el giro, acelera para llevar de nuevo a la moto a la posición vertical.
